El obispo de Málaga, Jesús Catalá, visitó este 24 de abril el barrio de Capuchinos por la festividad litúrgica de su Patrona e hizo un recorrido por la historia de la Congregación pastoreña, en su 250 aniversario fundacional (1771-2021). En la homilía pronunciada en la Misa solemne del Día de la Divina Pastora 2021, invitó a toda la comunidad parroquial a profundizar en el conocimiento del Buen Pastor, de la mano de la Divina Pastora de las Almas.
Esta fiesta instituida por Pio VI en 1795, gracias al empeño de los padres capuchinos, se celebra anualmente el tercer sábado del tiempo de Pascua, en la víspera de la dominica del Buen Pastor. Fue nuestro fundador, el beato fray Diego José de Cádiz, uno de los que más se afanaron por lograr el refrendo pontificio en favor de la Divina Pastora. El Papa concedió a los capuchinos de España que pudieran venerar como singular Patrona de sus misiones a la Madre del Buen Pastor, Jesucristo, poderosa mediadora entre Él y nosotros, su pueblo y ovejas de su rebaño.
Homilia del obispo Jesús Catalá
La visita del obispo de Málaga, en imágenes
Cruz pectoral por los 25 años al frente de nuestra Diócesis
La Congregación ha hecho entrega a Jesús Catalá de una Cruz pectoral, realizada en plata de ley por el taller malagueño de Orfebrería Montenegro, como recuerdo de sus 25 años al frente de la Diócesis de Málaga y coincidiendo con su visita a Capuchinos por la festividad de la Madre del Buen Pastor. En la Cruz está representado el cayado de la Divina Pastora de las Almas y la pluma de Santa Teresa de Jesús. Alberga una doble simbología: además de representar a los titulares de la parroquia capuhinera, el báculo simboliza el ministerio del obispo como pastor de la Iglesia malagueña y la pluma, su magisterio eclesial.
Oración de la comunidad parroquial
Dada las restricciones de estos tiempos de pandemia, la Misa solemne por la festividad de la Madre del Buen Pastor hubo de celebrarse con un aforo limitado. A su término, tuvo lugar una oración comunitaria, con presencia de Jesús Sacramentado, en la que participó gran parte de la comunidad parroquial que no pudo acceder a la celebración de la Eucaristía. Así concluyó el Día de la Divina Pastora 2021, cuya celebración prosigue durante el Domingo del Buen Pastor con una veneración extraordinaria durante toda la jornada. Loor a la Inmaculada Madre del Buen Pastor.
